Abogados y procuradores soportan diariamente el cierre de juzgados después de horas de espera por atención; un sistema de turnos que exige varios intentos y que, cuando se consiguen, tienen demoras de 15 días. El Colegio de Abogados no obtiene respuestas de la Corte pese a solicitar diálogo para resolver las dificultades.
El Colegio de Abogados de la Primera Circunscripción Judicial intentó reiteradamente organizar reuniones y solicitar audiencias para resolver y señalar las dificultades que atraviesan diariamente los colegas que recorren el Palacio de Justicia. Sin embargo no consiguieron atención de las autoridades del Poder Judicial.
Los representantes de abogados de la Ciudad de Mendoza acumulan reclamos, notas y solicitudes de los colegas que intentan sobrevivir y retener a sus clientes en medio de una pandemia que ya lleva 7 meses.
La atención en los tribunales ocasiona permanentes perjuicios a los profesionales del Derecho en su ejercicio profesional. Ya que por un lado es realmente dificultoso conseguir un turno para obtener atención en las diferentes mesas de entrada. Esos turnos tienen demoras de 15 días y es frecuente que se cierre un juzgado aún cuando hay gente con turno esperando por su atención.
Cotidianamente
el Colegio recibe numerosos pedidos de los profesionales del Derecho
que no pueden realizar su trabajo ni responder adecuadamente a las
necesidades de sus clientes para recibir el servicio de justicia que
merecen.
Autoridades del Colegio se caracterizan por la
búsqueda del diálogo, el acercamiento de distintas visiones, y la
colaboración en la resolución de los problemas. Lo hacen para
cumplir con su función de representar a los matriculados a quienes
representan. Sin embargo no han obtenido respuestas en su intento por
resolver estas dificultades.
En situaciones como las actuales, en las cuales resulta necesario arbitrar todos los medios posibles para dar solución a los servicios que se ven afectados por efecto de la crisis sanitaria, las autoridades del Palacio Judicial desoyen los pedidos de audiencias y reuniones en tanto los juzgados cierran y los turnos se acumulan sin atención.